Conozca más sobre Dime

‘Dime con quién andas, y te diré quién eres’ es una campaña bilingüe inspirada en el hecho de que los republicanos decidieron que para llegar al poder deben ser facilitadores de sus amigos extremistas y ser cómplices del racismo y la violencia que fomentan hacia los inmigrantes. Es una campaña basada en uno de los refranes más populares del idioma español que significa que las amistades que mantenemos son un poderoso indicador de quiénes somos.

Hemos señalado que líderes y destacadas figuras republicanas han adoptado detestables teorías conspirativas para atizar el miedo y el caos para ganar elecciones o aferrarse al poder. En sus campañas muchos emplean el mismo lenguaje y las mismas ideas de los racistas que marcharon empuñando antorchas en Charlottesville en 2017, y los asesinos en masa que perpetraron ataques en Pittsburgh, El Paso y Buffalo. Incluso cuando las ideas racistas que inspiraron estas masacres quedan al descubierto, los líderes republicanos intensifican la retórica y la defensa de estas ideas, o guardan un cobarde silencio ante quienes repiten la misma retórica racista.

También ha habido un alza en la cifra de republicanos que, en su esfuerzo por atraer votantes latinos, distorsionan sus verdaderas posturas en temas de gran importancia para esta comunidad, como la inmigración. Fingen ser defensores de la comunidad, pero abrazan a un Partido Republicano que activamente mina las soluciones reales en materia de inmigración y propone deportaciones masivas, entre otras cosas.

Esta campaña busca exponer y hacer que estos candidatos rindan cuentas porque, a menos que los candidatos republicanos se enfrenten activa y públicamente a las peligrosas ideas de sus amigos, ellos también son responsables de la dañina y racista retórica que atenta contra la seguridad de nuestras comunidades.

Preguntas Más Frecuentes

¿Qué es la campaña Dime con quién andas?

Dime con quién andas es una campaña bilingüe que pretende educar y al mismo tiempo pedir que los candidatos republicanos rindan cuentas por el extremismo temerario que su partido ha adoptado desde su cúpula. A menos que los candidatos republicanos se opongan activa y públicamente a las ideas peligrosas de sus amigos, ellos también son cómplices de las peligrosas y racistas mentiras que atentan contra la seguridad de nuestras comunidades.

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¿Cuál es el objetivo de la campaña Dime con quién andas?

Inicialmente, nos enfocamos en los diez congresistas republicanos que se presentan en distritos disputados. Estos son, Juan Ciscomani (AZ-06), John Duarte (CA-13), Mike Garcia (CA-27), David Valadao (CA-22), Monica De La Cruz (TX-15), Jen Kiggans (VA-02), Lori Chavez-DeRemer (OR-05), y Mike Lawler (NY-17). Además de los candidatos republicanos Derrick Anderson (VA-07) y Mayra Flores (TX-34). Sin embargo, cada candidato republicano que compita en este ciclo electoral debe refutar públicamente las mentiras irresponsables y peligrosas de otros republicanos o ellos también son responsables de esos esfuerzos.

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¿Cuál es la agenda republicana sobre los inmigrantes?

Los republicanos solían acoger a los inmigrantes y los refugiados. Pero ya no. Ahora, el plan republicano consiste en emplear el ejército para conducir redadas y deportaciones masivas de nuestros vecinos, familiares y amigos. No es una exageración. Se basa en las declaraciones de Trump y de sus principales asesores. El GOP es el partido del trumpismo y el nativismo con una agenda sobre inmigración basada en ideas impulsadas por grupos de odio nacionalistas blancos y por extremistas como Stephen Miller. Mientras algunos candidatos republicanos todavía pretenden ser buenos gestores de la seguridad y prosperidad de nuestras comunidades, están poniendo en peligro a esas comunidades. El liderazgo del partido negará la ciudadanía a bebés de padres indocumentados, deportará a los Dreamers, bloqueará a todos los refugiados, y desperdiciará miles de millones de dólares adicionales en el mismo fallido plan de crueldad y caos que condujo a separar familias en la frontera y a encerrar niños en jaulas.

Ahora, el liderazgo republicano continúa impulsando la imprudente y peligrosa idea de que los refugiados que buscan seguridad en Estados Unidos constituyen una “invasión” como parte de un complot para reemplazar a los blancos. Esta mentira conduce a la violencia. Los terroristas domésticos responsables de asesinatos en masa contra judíos en una sinagoga de Pittsburgh, contra mexicanos en un Walmart de El Paso, y contra afroamericanos en Buffalo actuaron, según sus escritos, inspirados por la retórica de la “invasión”. Algunos incluso acusan a los encargados de la política pública de admitir inmigrantes a Estados Unidos para “reemplazar a los estadounidenses blancos”. Son teorías conspirativas peligrosas. Legitimar este tipo de discurso pone en peligro a personas inocentes simplemente por el Dios al que le rezan o por el color de su piel.

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¿Qué mensajes peligrosos promueven los republicanos?

Por décadas los republicanos han explotado la histeria migratoria y fronteriza. Pero su retórica se ha vuelto más siniestra y peligrosa en los últimos años.

“Invasión”

Los republicanos, desde el liderazgo hasta la base, impulsan la absurda noción de que quienes buscan seguridad en Estados Unidos constituyen una “invasión”. Ese tipo de retórica ya ha provocado muertes. El pistolero que mató a 11 personas en Pittsburgh, Pensilvania, en 2018, el que mató a 23 personas en El Paso, Texas, en 2019, y el que mató a 11 en Buffalo, Nueva York, en 2022, se inspiraron en esa mentira. El pistolero que atacó El Paso había publicado un manifiesto antilatino en el que decía que el ataque era en respuesta a “la invasión hispana de Texas”. El asesino en masa que atacó Buffalo advirtió sobre una “invasión” en más de diez ocasiones en las diatribas racistas que escribió antes de matar a 11 personas.

Teoría del “reemplazo”

La teoría nacionalista blanca del “reemplazo” es una mentira nociva y racista que tiene sus orígenes en el movimiento eugenésico y en temas antisemitas. Afirma falsamente que existe un complot intencionado y coordinado para minar la democracia reemplazando el poder de voto de los blancos mediante una «invasión» de inmigrantes no blancos del sur global.

Esta teoría conspirativa, antes limitada a grupos marginales racistas, ha inspirado repetidamente violencia masiva mortal. Recibió una atención más amplia luego de que violentos racistas empuñando antorchas marcharon por las calles de Charlottesville, Virginia, en 2017, coreando “Los judíos no nos reemplazarán”, en un fin de semana que culminó con el asesinato de Heather Heyer. Pero esta mortal teoría conspirativa alguna vez marginal, ahora es un principio organizativo central de la estrategia electoral republicana. Es promovida por los medios de comunicación de derecha, encabezados por Tucker Carlson, y por un alarmante número de funcionarios electos y candidatos republicanos.

Mentiras electorales

Los líderes republicanos se han mostrado demasiado dispuestos a seguirle la corriente a las mentiras descaradas y racistas del expresidente Trump de que le “robaron” las elecciones de 2020. Mentiras que provocaron un mortal ataque coordinado en el Capitolio federal el 6 de enero de 2021 para anular los resultados de las elecciones.

Pero todas sus mentiras electorales sobre la elección del 2020 o sobre la “sustitución” de los votantes blancos no sólo son preocupantes por la violencia que generan sino también por el proyecto en contra de las mayorías que pretenden impulsar. Una busca socavar la legitimidad de nuestra democracia, mientras que la parte central de la otra teoría postula que los nuevos inmigrantes que no son elegibles para votar están minando las elecciones al sufragar de manera fraudulenta. Aunque este fenómeno no es real, es una poderosa ficción para justificar más barreras innecesarias a los ciudadanos que ejercen su derecho al voto.

Cada vez más, los dirigentes del Partido Republicano impulsan la falsa idea de que los inmigrantes se están robando las elecciones y crean el contexto para que sus partidarios rechacen los resultados electorales que no los favorecen y culpen a los inmigrantes. Esto supone una grave amenaza para nuestra democracia y al derecho de los ciudadanos de participar en las elecciones.

Todos estos candidatos guardan silencio en torno a estas peligrosas mentiras de sus poderosos amigos que dirigen el Partido Republicano.

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¿Qué pasa con los candidatos que dicen que la gente vota por ellos, no por su partido?

Este argumento ya no se sustenta. Los días de republicanos de mentalidad independiente han quedado en el pasado. Esto es especialmente cierto en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde los líderes toman las decisiones. Así, un voto a favor de un republicano es un voto a favor del liderazgo republicano en la Cámara Baja. De hecho, el primer voto que emitiría un nuevo legislador sería para elegir al presidente de la Cámara Baja. Cabe destacar que siete legisladores seleccionados por nuestra campaña votaron por Mike Johnson, de Luisiana, que había promovido repetidamente la mortífera teoría nacionalista blanca del “reemplazo”. Muchos también han proporcionado votos clave para la legislación antiinmigrante extremista promovida con esas mismas teorías conspirativas antidemocráticas y nacionalistas blancas.

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¿Qué quieren que hagan estos candidatos?

Refutar. Rechazar. Denunciar. De lo contrario, son cómplices.

No hemos visto nada de parte de ninguno de los candidatos. Lo que vemos es una aceptación total del Partido Republicano y su ortodoxia.

Aunque los candidatos republicanos a la Cámara Baja no quieran que los votantes sepan lo que dicen sus potenciales colegas, nosotros sí. Muchos candidatos republicanos esperan que la mayoría de los votantes no sepan de la radicalización que ha llevado al Partido Republicano a adoptar teorías conspirativas nacionalistas blancas que han provocado muertes en nuestras comunidades.

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